On April 24, the YWCA held its annual fundraising luncheon. The event brought together allies, community members, and advocates for social change. They gathered to support the organization’s many programs, which continue to impact lives across the region.
The guest of honor was Hollywood actress Lucy Liu. She delivered a heartfelt message of hope and strength.
With honesty and warmth, Liu reminded the audience that resilience lives within each of us. No matter the pain or challenge, we all carry the power to move forward.
An Empowering Afternoon
The room was filled with emotion and energy. One inspiring story after another sparked reflection—and action. Throughout the event, a spirit of unity could be felt. Guests applauded, laughed, and at times, were moved to tears.
Most importantly, the gathering renewed a shared commitment. Everyone present left more determined to build a future rooted in justice and equality.
Without a doubt, it was an unforgettable afternoon—one where sisterhood and purpose truly took center stage.
El 24 de abril, la YWCA celebró su almuerzo anual de recaudación de fondos. El evento reunió a aliados, miembros de la comunidad y defensores del cambio social.
Todos se unieron para apoyar los muchos programas de la organización, que siguen transformando vidas en la región.
La invitada de honor fue la actriz de Hollywood Lucy Liu. Compartió un mensaje conmovedor lleno de esperanza y fortaleza.
Con sinceridad y calidez, Liu recordó al público que la resiliencia vive dentro de cada uno. Sin importar el dolor o la dificultad, todos llevamos la fuerza para seguir adelante.
Una Tarde de Empoderamiento
El ambiente se llenó de emoción y energía. Cada historia inspiradora invitó a la reflexión—y también a la acción.
Durante todo el evento, se sintió un fuerte espíritu de unidad. Los asistentes aplaudieron, rieron y, en algunos momentos, se conmovieron hasta las lágrimas.
Lo más importante es que el encuentro renovó un compromiso compartido. Todos se marcharon con una mayor determinación de construir un futuro más justo e igualitario.
Sin duda, fue una tarde inolvidable, donde la hermandad y el propósito fueron los grandes protagonistas.